UN RASTRO DE CARMÍN FRANCÉS EN EL CUELLO DEL UNIFORME DE UN SOLDADO ALEMÁN
La Historia con mayúsculas suele escribirse siguiendo una sola dirección. La mayoría de veces. O mejor dicho, rotundamente en dos: la del vencedor y la del vencido. Pero la realidad no suele ser en tal modo simple y bidimensional… la vida de a pie de la gente corriente puede ser, gracias a dios y en alguna que otra ocasión, fantástica, colorista y poliédrica. Y muchas veces sorprende por contradecir la opinión generalizada que la querría más adusta y sombría.
Ese es el caso de La ocupación de París por parte de las tropas alemanas de la Wehrmacht. De 1940 al 1945. Un historiador galo, Patrick Buisson, después de indagar en archivos, periódicos de la época -y fuentes un poco más secretas- descubre que ese periodo fue el florecimiento, el desatamiento de una alegría erótica poco conocida en la Francia de entonces. Ello le lleva a escribir "LES ANNÉES ÉROTIQUES" de la editorial Albin Michel.
Miles de muchachas, mujeres y hasta homosexuales se arrojaron con algarabía a los brazos de cincelados y apuestos soldados alemanes. Aparte de una ocupación, Aquello fue una insospechada incursión al núcleo mismo del deseo…esos varoniles y rubicundos chicos, muchos Jurgëns, un puñado de Derecks, un montón de Arnolds tomaron champán en nuevos cabarets, y hasta una simple taza de café a plena luz del día parisino, con las Annettes que vieron en ellos el galán esplendoroso que las llevaba de fiesta, regalaba medias de seda y hasta mimaba con cariño. contribuían incluso generosamente al mantenimiento de las familias de las susodichas; y otra cosa: la homosexualidad gozó de una libertad inusitada y veraz como nunca había conocido.
Una Listísima Coco Chanel compartió suite en el Ritz con un alto cargo del estado mayor, y Marguerite Duras también vivió su particular historia de amor con un oficial alemán de gran prestancia física, según cuentan cuchicheos envidiosos…
Strass, música, poesía y besos de amante enfebrecido… ese divino paréntesis acabó abruptamente con la liberación del País; Gaullistas y comunistas se unieron en una particular cruzada que consistía en, públicamente, avergonzar y vapulear a las traidoras mujeres que habían sucumbido al diablo germánico. Resultado: Las que tuvieron la desgracia de ser delatadas fueron perseguidas por las calles, rapadas sus cabezas y apedreadas sin piedad. Extenuadas volvieron al redil a remendar calcetines y tricotar calzones, entre bostezos con sabor a vino tinto y aburrimiento sin fin.
La vida disoluta e hilarante se había acabado, y hasta los homosexuales volvieron a ser perseguidos por una furia machista sin precedentes.
La Historia con mayúsculas suele escribirse siguiendo una sola dirección. La mayoría de veces. O mejor dicho, rotundamente en dos: la del vencedor y la del vencido. Pero la realidad no suele ser en tal modo simple y bidimensional… la vida de a pie de la gente corriente puede ser, gracias a dios y en alguna que otra ocasión, fantástica, colorista y poliédrica. Y muchas veces sorprende por contradecir la opinión generalizada que la querría más adusta y sombría.
Ese es el caso de La ocupación de París por parte de las tropas alemanas de la Wehrmacht. De 1940 al 1945. Un historiador galo, Patrick Buisson, después de indagar en archivos, periódicos de la época -y fuentes un poco más secretas- descubre que ese periodo fue el florecimiento, el desatamiento de una alegría erótica poco conocida en la Francia de entonces. Ello le lleva a escribir "LES ANNÉES ÉROTIQUES" de la editorial Albin Michel.
Miles de muchachas, mujeres y hasta homosexuales se arrojaron con algarabía a los brazos de cincelados y apuestos soldados alemanes. Aparte de una ocupación, Aquello fue una insospechada incursión al núcleo mismo del deseo…esos varoniles y rubicundos chicos, muchos Jurgëns, un puñado de Derecks, un montón de Arnolds tomaron champán en nuevos cabarets, y hasta una simple taza de café a plena luz del día parisino, con las Annettes que vieron en ellos el galán esplendoroso que las llevaba de fiesta, regalaba medias de seda y hasta mimaba con cariño. contribuían incluso generosamente al mantenimiento de las familias de las susodichas; y otra cosa: la homosexualidad gozó de una libertad inusitada y veraz como nunca había conocido.
Una Listísima Coco Chanel compartió suite en el Ritz con un alto cargo del estado mayor, y Marguerite Duras también vivió su particular historia de amor con un oficial alemán de gran prestancia física, según cuentan cuchicheos envidiosos…
Strass, música, poesía y besos de amante enfebrecido… ese divino paréntesis acabó abruptamente con la liberación del País; Gaullistas y comunistas se unieron en una particular cruzada que consistía en, públicamente, avergonzar y vapulear a las traidoras mujeres que habían sucumbido al diablo germánico. Resultado: Las que tuvieron la desgracia de ser delatadas fueron perseguidas por las calles, rapadas sus cabezas y apedreadas sin piedad. Extenuadas volvieron al redil a remendar calcetines y tricotar calzones, entre bostezos con sabor a vino tinto y aburrimiento sin fin.
La vida disoluta e hilarante se había acabado, y hasta los homosexuales volvieron a ser perseguidos por una furia machista sin precedentes.
Luego vendrían los americanos con sus cigarrillos y coca-cola, pero eso ya es otra historia…
18 comentarios:
Y seguro que muchas de ellas se sacrificaron para dar de comer a su familia... para luego verse repudiadas por su sacrificio... ¡Ah, la hipocresía!
Un abarzo!!
Me gustó mucho ese fragmento de Salinger, no conozco nada del autor –aparte de este título- pero me recuerda mucho a Tom Spanbauer, escritor que siempre recomiendo.
Sobre el texto de hoy solo decir que siempre - ya desde pequeñito cuando paseaba por la Ramblas y veía a los elegantes marineros italianos con su puñal en el cinto, paseando del brazo de señoritas que habían encontrado por el camino cinco travesías antes- como a los señoras les encantan los señores con uniforme, de los homosexuales sabía poco entonces. Ah! Los teutones tedescos!
Perdona, querida, pero YO no comparto nada, y menos una habitación del Ritz. Faltaría más.
Es que eso de hacer el amor y no la guerra siempre ha estado muy mal visto.
Aoffidersen mi Froilán.
...y en fondo del cabaret suena la música de Lily Marlene...
M'he aixecat tova aquest matí :)
Pero el cine no ha explotado todavía esa vía, que también puede ser heróica.
A ver si lo vemos.
Uniformes...
Soldados, enfermeras, marineros, azafatas.
Atraen.
Qué interesante! Es cierto, sólo se conoce el escarnio de después de la guerra.
Aunque a mi siempre me pareció emocionante el amor prohibido con los ocupantes alemanes.
Besos!
p.d.: conquistas bélicas=conquistas sexuales (ya sea por las buenas o por las malas)
Preciosa la foto en blanco y negro del post y también la de los marineros del lateral.
Otro beso!
MARGUIS: Claro, este caso era el más común, me temo...
XNEM: Se lo recomiendo vivamente el libro. Bueno, es un ´clásico, vamos...
SI, no se que tiene los uniformes que convierten en caballero casi a cualquiera...
COCO: Ja,ja,ja...
QUizás una antepasada tuya?
MAD HATTER: CLaro...y más entre enemigos...auqnue a la vista del caso unos/as cuantos se lo pasaron por el forro, ejem...
EVA AL DESNUDO: Seguro que si...
Niña, estás de ánimos que ni pintada para la chica de tu avatar...melancóooolica y bella...
HOMBREDEBARRO: Eso...a ver si alguién se atreve...tiene su morbo.
EL FUTURO BLOGUERO: Es verdad..quizás haya una explicación antropológica y todo...ghasta los curas, cuando son guapos, con sus "alzacuellos" blancos (vease a Monty Clift en "yo confieso" o a la atractiva Audrey en "historia de una monja")
ALOMA69: Tiene un morbo increible para mi también, auqnue cualquier guerra siempre es deplorable, pero las cosas son como son y las personas tenemos nuestra propia manera de "gestinar" las circustancia no del todo favorables...es humano...
SI...la foto del post es tan espontánea y natural...
Y a mí que los alemanes no me ponen. Donde esté un morenazo...
Bueno NOemí...idem de idem...
Un moreno de "verde Luna" y que se quiten los demás...
Y no te creas, algun que otro moreno alemás se dejaría caer por allí...;)
Que casualidad, anoche en la 2 pusieron Historia de una Monja y ahora mismito en el mismo canal estan hablando de Jaume Plen!!!!
...sa, Jaume Plensa, tenía prisa por ponerlo :)
Ellos sí que practicaban el "Haz el amor, no la guerra". Jejeje.
Qué interesante el tema, puedes recomendarme bibliografía?.
Un abrazo.
Después recordé una película sobre este tema, no puedo recordar el título (una pena), primero se presentaba todo el desenfreno sexual para después dar un giro y narrar la historia de una mujer que por las circunstancias empezó a practicar abortos para "pagar" por sus "pecados" al final de la guerra, creo que se basaba en hechos reales.
Abrazo!
Ui, lo siento, quería poner: "para "pagar" luego por sus "pecados", al final de la guerra", no es que practicara abortos para pagar sus pecados.
Demasiado trabajo hoy y yo con este sol que me iría de compras, de paseo y a una terraza, todo siempre al revés, CARAJO!!!
Otro abrazo1
Eva AL DESNUDO: AY...la CAUSALIDAD!!!
A-ESCENA: QUe yo sepa, sólo hay este libro que menciono, y además en francés, pero seguramente habrá alguno que , aunque de refilón, cuente algo parecido...
SI me entero te informo, vale?
A mi también me parece apasionante...
ALOMA69: oYes, pues me suena a mi también...y muy antigua no es...
Tranquila con lo de las palbras y letras...
Yo desde que escribo con ordenador me he vuelto diléxica, te lo juro...no sabes la de veces que "trastoco" las letras de sitio y tengo que borrar comentarios y volvérlos a poner...
besos!
Publicar un comentario